El esfuerzo correcto busca crear un contexto en el cual los hábitos aprendidos de complacer o negar sentimientos puedan ser despojados.
El esfuerzo correcto sugiere que es posible, y a menudo deseable, obtener el control sobre los impulsos del ego. La condición previa para esto es la capacidad que todos tenemos, por infrautilizada que sea, de observar nuestras propias mentes.
En la meditación, nos entrenamos para no alejar lo desagradable y no aferrarnos a lo agradable.
Mark Epstein
La atención plena, o mindfulness, fue diseñada para ayudar a las personas a cultivar la autoconciencia para que puedan permanecer más plenamente en el momento y no estar a merced de sus pensamientos más destructivos.
En el budismo, se dice que hay cuatro estados mentales «divinos»: amabilidad, compasión, alegría y ecuanimidad.
El esfuerzo correcto generalmente significa hacer más espacio para estos sentimientos divinos sin juzgarnos con tanta dureza.
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