Es muy posible que este universo pueda albergar más elementos. Pero en estos días sentí que debía llegar hasta este punto.
Aquí, seguimos aprendiendo que hay materiales que separados se ven divinos, pero juntos no tanto. Que muchas veces hay que esperar para que lo que hemos hecho se asiente (y no se mezcle con lo demás).
Y siempre está el recordatorio de estar totalmente presente, porque cuando no pasa, pintamos cosas de formas diferentes o usamos colores a las que teníamos en mente.
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